El Juego de la Oca, es un mapa cifrado del Camino de Santiago, donde los Templarios marcaban los lugares, que tenían una determinada significación.
Es un jeroglífico, donde los símbolos, eran conocidos por toda la Orden, y que permitía un entendimiento a todos los caballeros de la Orden, independientemente del idioma de cada uno.
En otras palabras, el Juego de la Oca, era la Guía del Camino de Santiago de Ida y vuelta.
¿ Pero como reconocer los lugares indicados en la Guía?
Los Templarios, eran monjes y soldados y compartían los Mensajes Ocultos con el gremio de Compañeros Constructores, que realizaban las catedrales y monumentos dejando los símbolos que reconocían los Templarios y marcaban las Ubicaciones que figuraban en el Juego de la Oca.
Tenemos resuelto los problemas de: Idioma, Guía y los Carteles anunciadores de las Ubicaciones.
¿ Pero te estarás preguntando, si cada iniciado Templario se desplazaba, con un Tablero de Juego de la Oca debajo del brazo?.
Nada de eso, cada época tiene sus soluciones y son tan fáciles que a veces nos resultan inimaginables. Los Símbolos, eran vulgares y ello permitía un rápido conocimiento entre la población, que no necesitaba conocer el significado oculto. El Tablero, era de fácil representación, fácil geometría, fácil de ubicar, orientado, direccionable, ordenado y métrico. Habida cuenta que era un juego, no es de extrañar que otras ordenes Religioso-Militares, como los Hospitalarios o Caballeros Teutones, contribuyesen a la difusión del juego en el área geográfica de influencia, pero sin el componente criptográfico-esotérico.
