En estos momentos, la Televisión Cubana, la misma que durante años nos ha mentido sobre el invisible éxito de la cosecha de papas, la que nos quiso hacer creer que los cubanos de afuera eran apátridas y luego los transformó en emigrados con los que se quiere tender puentes, la que nos dijo que murieron como héroes en Granada los que regresaron luego como felices prisioneros liberados, la que aseguró que el opositor José Daniel Ferrer era un delincuente común y no dijo una palabra cuando fue excarcelado antes de cumplir un año de condena, la que nos asegura que los niños en Cuba son felices y los estudiantes tienen futuro y los médicos van de misión por altruismo, esa, la que ha producido más quintales de mentiras y manipulación en 60 años que viandas y frutas la agricultura de Cuba, ahora está dedicando un programa entero a tratar de convencer a cuanto desinformado hay en Cuba (y hay muchos, gracias al monopolio de las comunicaciones) de que Denis Solís es delincuente, Luis Manuel Otero y todo el Movimiento San Isidro también, y a explicarnos, Fernando Rojas mediante, la gran protesta frente al Ministerio de Cultura. Mientras veo a esos lamentables colegas que conducen el programa, solo pienso dos cosas: hay que liberar a Denis, salvar a Luis Manuel, y la tercera: la dictadura ahora, por primera vez en décadas, mira a todos esos artistas que han invertido el juego, y siente que tiene Miedo. Mucho Miedo.

Por: Henry Constantino