Los asesinatos y el secuestro fueron perpetrados en el día de Nochebuena en Pemi, en el estado de Borno (Nigeria), cuando miembros de la Iglesia de los Hermanos, una iglesia cristiana protestante, se preparaban para las celebraciones navideñas en su templo, que fue tiroteado e incendiado por los terroristas.
Este es un mensaje de regalo para los cristianos del mundo y especialmente para los nigerianos entre ellos, así transmitieron el mensaje segundos después de la masacre.
Un periodista ceutí informó del asesinato de cinco de los cristianos secuestrados la semana pasada en Borno. El asesinato, como otros perpetrados por Boko Haram y por el ISIS, se escenificó vistiendo a las víctimas con trajes naranjas de presos. Según Nasr, los terroristas del ISIS, de cuya red forma parte Boko Haram se atribuyeron los crímenes. Lo interesante es que la prensa internacional no se hace eco de esta situación.
En diciembre de 2019 Insurgentes islamistas matan en Burkina Faso a 35 civiles, de ellos 31 mujeres, mientras Boko Haram asesina en Nigeria a otras siete, en esta ocasión la prensa se hizo eco.
El nuevo crimen coincide con la prohibición del Estado Islámico a los musulmanes para que participen en las fiestas navideñas.
