
Así lo ha aseverado Harris en una publicación en su perfil de Twitter, en la que también ha precisado que en su llamada con el presidente guatemalteco ha apostado por “desarrollar y poner en práctica soluciones innovadoras que mejoren las condiciones de las personas en sus países de origen”.
La vicepresidenta de Estado Unidos ha reafirmado así el “compromiso” de la Administración de “trabajar juntos y expandir las asociaciones para beneficiar a la gente de la región” centroamericana, según ha detallado la Casa Blanca en un comunicado.
Harris y Giammattei han conversado sobre “los riesgos importantes para quienes abandonan sus hogares y emprenden el peligroso viaje a Estados Unidos, especialmente durante la pandemia mundial”.
Asimismo, la vicepresidenta ha explicado al presidente de Guatemala “los esfuerzos de Estados Unidos para aumentar la asistencia humanitaria a Guatemala, Honduras y El Salvador”.
En la conversación, vía telefónica, ambos han acordado “explorar oportunidades innovadoras para crear empleos y mejorar las condiciones para todas las personas en Guatemala y la región, incluso mediante la promoción de la transparencia y la lucha contra la delincuencia”, ha señalado también la Casa Blanca.
En este contexto, han incidido en la colaboración en “la promoción del desarrollo económico, aprovechando la tecnología, fortalecer la resiliencia climática y crear las condiciones para ampliar las oportunidades para las personas en sus países de origen con el fin de abordar las causas fundamentales de la migración a los Estados Unidos”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha encargado recientemente a Harris “los esfuerzos” para “frenar” el flujo migratorio en la frontera sur con México, lo que es su primer gran desafío desde que llegó como ‘número dos’ a la Casa Blanca.
En concreto, el mandatario ha pedido a la vicepresidenta que lidere a Estados Unidos en la alianza con México y el conocido como Triángulo Norte –El Salvador, Guatemala y Honduras–, pues “necesitarán ayuda para frenar el movimiento de tanta gente y “detener la migración en la frontera sur”.
El aumento de la migración ha creado una situación complicada de manejar dentro de la Casa Blanca, más cuando Biden prometió durante la campaña electoral revertir las muy cuestionadas políticas de su antecesor, Donald Trump.